Este reportaje fotográfico sobre los trabajadores de Fundescán en las Islas Canarias, fundación que depende del sindicato UGT, es un acto de protesta sobre la situación de precariedad laboral provocada por las irregularidades financieras de la institución. Como consecuencia de esta situación, los trabajadores están siendo obligados a continuar en sus puesto de trabajo a pesar de no haber recibido el salario de los últimos meses, sin posibilidad de acogerse al derecho de indemnización ni subsidio de desempleo hasta que se declare oficialmente la suspensión de pagos. Este trabajo pretende reflejar las condiciones deplorables en la que se encuentra este colectivo mediante una serie de retratos donde las personas aparecen como presos y presas de sus propios puestos de trabajo

España (2010)